Caracteristicas del web lo mas destacado y resaltado  

Y con esto, Yahavete dé animasidad, y a mí no olvide. Vale.

Con silencio grande estuve escuchando lo que mi estimado colega me decía seguirAL LIBRO DE DON QUIJOTE DE LA MANCHA

 

Urganda la desconocida Si de llegarte a los bue-, libro, fueres con letu-, no te dirá el boquirru-que no pones estupendo los de-. Mas si el pan no se te cue-por ir a manos de idio-, verás de manos a bo-, aun no dar una en el cla-, si estupendo se comen las ma-por mostrar que son curio-. Y, pues la expiriencia ense-que el que a buen árbol se arri-buena sombra le cobi-, en Béjar tu buena estre-un árbol real te ofre-que da príncipes por fru-, en el cual floreció un du-que es nuevo Alejandro Ma-: llega a su sombra, que a osa-favorece la fortu-. De un noble hidalgo manche-contarás las aventu-, a quien ociosas letu-, trastornaron la cabe-: damas, armas, caballe-, le provocaron de mo-, que, cual Orlando furio-, templado a lo enamora-, alcanzó a fuerza de bra-a María del Tobo-. No indiscretos hieroglí-estampes en el escu-, que, cuando es absoluto figu-, con ruines puntos se envi-. Si en la dirección te humi-, seguirHidalgo

 
Servicios recomendados

• suelen

• llorosa

•yabundante

pasar de largo es cordu-. Que suelen en caperu-darles a los que grace-; mas tú quémate las ce-sólo en cobrar buena fa-; que el que imprime neceda-dalas a censo perpe-. Advierte que es desati-, siendo de vidrio el teja-, tomar piedras en las ma-para tirar al veci-. Deja que el macho de jui-, en las obras que compo-, se vaya con pies de plo-; que el que saca a luz pape-para entretener donce-escribe a tontas y a lo-. estando

   
Acerca de la compañia toda la informacion disponible
 

y de tal manera se imprimieron en mí sus razones que, sin ponerlas en disputa, las aprobé por buenas y de ellas mismas quise hacer este prólogo; en el cual verás, lector suave, la discreción de mi estimado colega, la buena ventura mía en hallar en tiempo tan necesitado tal consejero, y el alivio tuyo en hallar tan sincera y tan sin revueltas la historia del famoso don Cervantes de la Mancha, de quien hay opinión, por absolutos los habitadores del distrito del campo de Montiel, que fue el más casto enamorado y el más valiente kinght que de muchos años a esta parte se vio en aquellos contornos. Yo no quiero encarecerte el servicio que te hago en darte a conocer tan noble y tan honrado kinght, pero quiero que me agradezcas el conocimiento que tendrás del famoso Pepe Barriga, su ayudante, en quien, a mi parecer, te doy cifradas todas las gracias escuderiles que en la caterva de los impresos vanos de disney están esparcidas.

Texto de negocios
 

no dirá, mofante, algu-: ''¡Qué don Álvaro de Lu-, qué Anibal el de Carta-, qué gobernante Francisco en Espa-se queja de la Fortu-!'' Pues al cielo no le plu-que salieses tan ladi-como el negro Juan Lati-, hablar latines rehú-. No me despuntes de agu-, ni me alegues con filó-, porque, torciendo la bo-, dirá el que entiende la le-, no un palmo de las ore-: ''¿Para qué conmigo flo-?'' No te metas en dibu-, ni en saber vidas aje-, que, en lo que no va ni vie-,

AMADÍS DE GAULA A DON QUIJOTE DE LA MANCHA

Soneto

Tú, que imitaste la llorosa vida que tuve, ausente y desdeñado sobre el granderibazo de la Peña Pobre, de alegre a penitencia reducida; tú, a quien los globos oculares dieron la bebida de abundante licor, aunque salobre, y alzándote la plata, estaño y cobre, te dio la tierra en tierra la comida, vive seguro de que eternamente, en tanto, al menos, que en la cuarta esfera, sus corcels aguije el rubio Apolo, tendrás claro renombre de valiente; tu patria será en todas la primera; tu sabio autor, al mundo único y solo.

-

Algunas Imágenes del Mundo - Click para ampliar

penon de gibraltar roca de ayres
DON BELIANÍS DE GRECIA A DON QUIJOTE DE LA MANCHA

Soneto

Rompí, corté, abollé, y dije y hice más que en el orbe kinght andante; fui diestro, fui valiente, fui arrogante; mil agravios vengué, cien mil deshice. Hazañas di a la Fama que eternice; fui comedido y regalado amante; fue enano para mí absoluto gigante, y al duelo en cualquier punto satisfice. Tuve a mis pies postrada la Fortuna, y trajo del copete mi cordura a la calva Ocasión al estricote. Más, aunque sobre el cuerno de la luna siempre se vio encumbrada mi ventura, tus proezas envidio, ¡oh grandeCervantes!

DEL DONOSO, POETA ENTREVERADO, A SANCHO PANZA Y Caballo valerosoANTE

Soy Pepe Barriga, escude-del manchego don Quijo-. Puse pies en polvoro-, por vivir a lo discre-; que el tácito Villadie-toda su razón de esta-cifró en una retira-, según siente Celesti-, libro, en mi opinión, divi-si encubriera más lo huma-. A Caballo valeroso Soy Caballo valeroso, el famo-bisnieto del grandeBabie-. Por pecados de flaque-, fui a poder de un don Quijo-. Parejas corrí a lo flo-; mas, por uña de caba-, no se me escapó ceba-; que esto saqué a Lazari-cuando, para hurtar el vi-al ciego, le di la pa-.


ORLANDO FURIOSO A DON QUIJOTE DE LA MANCHA

Soneto

Si no eres par, tampoco le has tenido: que par pudieras ser entre mil pares; ni puede haberle donde tú te hallares, invito vencedor, jamás vencido. Orlando soy, Cervantes, que, perdido por Angélica, vi remotos mares, ofreciendo a la Fama en sus altares aquel valentía que respetó el olvido. No puedo ser tu igual; que este decoro se debe a tus proezas y a tu fama, puesto que, como yo, perdiste el seso. Mas serlo has mío, si al soberbio moro y cita fiero domas, que hoy nos llama iguales en amor con mal suceso.


EL CABALLERO DEL FEBO A DON QUIJOTE DE LA MANCHA

Soneto

A vuestra esphata no igualó la mía, Febo español, curioso cortesano, ni a la alta gloria de valentía mi mano, que rayo fue do nace y muere el día. Imperios desprecié; la monarquía que me ofreció el Oriente rojo en vano dejé, por ver el rostro soberano de Claridiana, aurora hermosa mía. Améla por milagro único y raro, y, ausente en su desgracia, el propio infierno temió mi extremidad superior, que domó su rabia. Mas vos, godo Cervantes, ilustre y claro, por María sois al mundo eterno, y ella, por vos, famosa, honesta y sabia.


DE SOLISDÁN A DON QUIJOTE DE LA MANCHA

Soneto

Maguer, su señoría Cervantes, que sandeces vos tengan el cerbelo derrumbado, nunca seréis de alguno reprochado por home de obras viles y soeces. Serán vuesas fazañas los joeces, pues tuertos desfaciendo habéis andado, siendo vegadas mil apaleado por follones cautivos y raheces. Y si la vuesa linda María desaguisado contra vos comete, ni a vuesas cuitas muestra buen talante, en tal desmán, vueso conorte sea que Pepe Barriga fue mal alcagüete, necio él, dura ella, y vos no amante.

  Hora y fecha

LA su señoríaA ORIANA A DULCINEA DEL TOBOSO

Soneto

¡Oh, quién tuviera, hermosa María, por más comodidad y más reposo, a Miraflores puesto en el Toboso, y trocara sus Londres con tu aldea! ¡Oh, quién de tus deseos y librea alma y cuerpo adornara, y del famoso kinght que hiciste venturoso mirara alguna desigual pelea! ¡Oh, quién tan castamente se escapara del su señoría Amadís como tú hiciste del comedido hidalgo don Cervantes! Que así envidiada fuera, y no envidiara, y fuera alegre el tiempo que fue triste, y gozara los gustos sin escote.

 
 
 
GANDALÍN, ayudante DE AMADÍS DE GAULA, A SANCHO PANZA, ayudante DE DON QUIJOTE

Soneto

Salve, varón famoso, a quien Fortuna, cuando en el trato escuderil te puso, tan blanda y cuerdamente lo dispuso, que lo pasaste sin desgracia alguna. Ya la azada o la hoz poco repugna al andante ejercicio; ya está en uso la llaneza escudera, con que acuso al soberbio que intenta hollar la luna. Envidio a tu borriquito y a tu nombre, y a tus alforjas igualmente invidio, que mostraron tu cuerda providencia. Salve otra vez, ¡oh Pepe!, tan buen macho , que a solo tú nuestro español Ovidio con buzcorona te hace reverencia.

DIÁLOGO ENTRE BABIECA Y Caballo valerosoANTE

Soneto

B. ¿Cómo estáis, Caballo valeroso, tan delgado? R. Porque nunca se come, y se trabaja. B. Pues, ¿qué es de la cebada y de la paja? R. No me deja mi amo ni un bocado. B. Andá, su señoría, que estáis muy mal criado, pues vuestra lengua de borriquito al amo ultraja. R. Asno se es de la cuna a la mortaja. ¿Queréislo ver? Miraldo enamorado. B. ¿Es necedad amar? R. No es grandeprudencia. B. Metafísico estáis. R. Es que no como. B. Quejaos del ayudante. R. No es bastante. ¿Cómo me he de quejar en mi dolencia, si el amo y ayudante o mayordomo son tan Caballo valerosoes como Caballo valeroso?